Hostel Che Viajero es un espacio pensado para compartir y descansar en el corazón de Villa Gesell. A solo tres cuadras del mar ya pasos del centro, nuestro albergue combina la calidez familiar con la tranquilidad de la ciudad. Con muchos años de historia, hoy seguimos siendo un lugar cercano, amigable y auténtico para quienes buscan vivir Gesell de una manera diferente.
Che Viajero es historia y amor, te invitamos a descansar como si estuvieras en casa.
En 1989, Jose —o Bocha, como lo conocían muchos— decidió apostar por un sueño: compró el histórico Hotel Splendid, un hotel ya construido que abría sus puertas cada verano. Desde el primer día lo manejó como todo lo que él hacía: con calidez, mucha dedicación y ese espíritu bien familiar que marcó a varias generaciones de huéspedes.
El hotel funcionaba simple, a pulmón, con la ayuda de su esposa y, más adelante, con Pablo, su sobrino, que se sumó de lleno al proyecto. Era una época de mesas largas, anécdotas de pasillo, chicos corriendo por el lobby y ese ambiente clásico de Villa Gesell que muchos aún recuerdan.
Para 1995, Bocha y Pablo fueron por más. Ese verano sumaron el Restaurant Village, que rápidamente se convirtió en punto de encuentro para amigos, familias y visitantes de todos lados.
El restaurante también fue siempre de la familia: pasó por las manos del hijo de Bocha, amigos, primos y todo el que quisiera dar una mano. Entre platos, risas y noches larguísimas de temporada, se fueron acumulando recuerdos, historias y hasta hijos que literalmente crecieron en ese edificio. Hotel y restaurante convivieron juntos durante años, creando una comunidad que iba más allá del turismo.
Después de un tiempo en que el hotel estuvo alquilado y pasó por otras administraciones, en 2010 Bocha y Pablo decidieron volver a apostar fuerte. Cambiaron la mirada, arriesgaron y renovaron todo desde cero para crear algo distinto: un hostel.
Refaccionaron la construcción original, sumaron una edificación nueva al frente (más moderna y luminosa), y transformaron el lugar en un espacio más libre, relajado y auténtico, pensado para viajeros que llegan buscando mucho más que una cama.
Así nació Hostel Che Viajero: un lugar con historia, con alma y con esa mezcla perfecta entre lo hogareño y lo aventurero que define a Villa Gesell. Acá cada verano se escribe una historia nueva, pero ninguna se olvida de dónde venimos.
Este proyecto tiene un nombre que nunca vamos a dejar de mencionar: Bocha, el corazón de esta historia.
Él fue quien, con una mezcla perfecta de visión, cariño y esa cuota justa de locura hermosa, compró el viejo Hotel Splendid y lo transformó en un lugar lleno de vida. Bocha no solo fundó un hotel: fundó un modo de hacer las cosas.
Su forma de recibir a la gente, de preocuparse por cada detalle, de abrir la puerta como si cada huésped fuera parte de la familia, quedó grabada en todos los que lo conocieron. Hoy ese espíritu sigue vivo en cada rincón del hostel, en cada temporada, en cada anécdota que todavía se cuenta en la cocina o en el patio.
Para quienes lo amamos, Bocha fue un pilar: un tipo bueno, generoso, apasionado, con ideas grandes y un corazón más grande todavía.
Su legado es este lugar y también la manera de sostenerlo, con amor, trabajo y alegría.
Acá seguimos, como vos querías: cuidando este sueño. Con mucho amor, tu familia.
